Conocí a la persona más bella del mundo,
su voz y su carisma me enamoraron.
Colmada de dicha tan genuina,
deseaba no dejar de ser una niña
Aprendí a ser autentica al amar,
agradeciendo las horas que a su lado compartía.
Inmortalice mi alma en su mirada,
presumí ante dedicación tan marcada.
Su apariencia ha cambiado,
él ya no está a mi lado.
Se marchó para iluminar mi camino,
el cielo trasformo mi destino.
Aún te recuerdo, te sueño,
Aún te lloro, te necesito.
Aunque todavía no es mi momento,
esperarme a trasgredir el umbral
y caminar juntos lejos de este mundo terrenal.
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